Ir al contenido principal

Destacados

Técnica para doblar los palitos de helado

Con palitos de helado podemos hacer las más variadas creaciones, e incluso crear objetos circulares con ellos, a pesar de su rigidez. Aquí te contamos la técnica para doblarlos. // por Eugenia para Como hacer para... Método para Doblar los Palitos de Helado Con simples palitos de helado puedes crear un sinfín de accesorios, tanto para usar a modo de bisutería, para hacer diversas manualidades, o quizás como emprendimiento para vender o regalar. Aprendamos una técnica simple para doblar los palitos de helado y hacer las más variadas creaciones. Materiales necesarios Puedes conseguir los palitos en cualquier tienda de manualidades y artesanías, en papelerías... o también tomar tantos helados como quieras, para luego lavarlos bien y reutilizarlos. Esta opción, seguramente, será la que te recomendarán tus hijos. Además, utilizaremos un contenedor de fondo plano, de no menos de 3 cm de altura y de mayor largo que los palitos, agua caliente, vasos y objetos de diversas formas

Translate

English French German Italian Dutch Russian Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified

Pasta de Sal para modelar


La pasta de sal es una de las masas más fáciles de elaborar. Recuerda a la plastilina y, con ella, se pueden realizar figuras variadas que sorprenden por la sencillez con que se modelan. Si se trabaja con las manos, es cierto que conviene tener una pizca de destreza, pero también se puede optar por emplear moldes, que permiten acabados muy realistas con trabajos de poca dificultad.



Cómo elaborar la masa
Como su propio nombre indica, la sal es el principal ingrediente de esta pasta. Pero no el único. Para adquirir su textura definitiva necesita la ayuda de otros tres colaboradores: agua, harina y aceite. La cantidad que debe emplearse es, aproximadamente, dos vasos de harina, un vaso de sal, otro de agua y una cuchara de aceite o glicerina. Estos ingredientes se mezclan en un cuenco hasta obtener una pasta, que no debe ser demasiado líquida -conviene agregar el agua poco a poco-. Cuando la pasta se desprenda fácilmente de las paredes del cuenco y no se pegue a las manos, estará lista para trabajar con ella.
En cuanto a la conservación, durante el trabajo hay que mantener la pasta de sal "en una caja hermética de plástico para que no se seque", explica Arlette Martín, responsable y creadora de Arteazul. Además, si no se emplea toda la masa, se puede guardar hasta dos días en el refrigerador sin que pierda sus propiedades (en una bolsa de plástico). Para que sea útil, la pasta de sal debe tener una textura similar a la masa de pizza o pan. "Si utilizamos sal gorda, la textura será más rugosa", apunta Arlette.

Si la pasta va a ser utilizada por niños, se puede conseguir una masa más elástica con la mezcla de 2 tazas de harina con un poco de levadura, 1 taza de agua, 2 cucharas soperas de aceite y 4 cucharas de café de "blanco de españa", una masa similar al yeso que se emplea para blanquear. Estos ingredientes se cuecen en un cazo a fuego muy suave y, cuando la pasta no se pegue y forme una bola, se deja enfriar.

Consejos
Modelar con pasta de sal no es difícil. A pesar de los resultados, la técnica sorprende por su sencillez. Se puede dar forma a pequeñas figuras, tazones, sombreros, pulseras, collares... En todo caso, el éxito de un objeto hecho con pasta de sal "depende enteramente de su cocción: hay que secar las figuras en el horno, a unos 120 ó 150 grados, por lo menos durante 30 minutos", recomienda Arlette. El tiempo de horneado depende de aspectos como el grado de humedad o el grosor de cada pieza. Para modelados pequeños y frágiles, se puede trabajar directamente sobre papel para horno. De esa manera, basta con deslizar el papel sobre la placa. "Así evitamos manipular el pequeño modelado", precisa la responsable de Arteazul.
Una vez que las figuras están secas hay que pintarlas. Si se quieren obtener tonos suaves, lo más recomendable es utilizar acuarelas. Si se prefieren los tonos vivos, hay que decantarse por pinturas acrílicas (con agua). También se pueden emplear colorantes que se mezclan directamente con la masa. El último paso del proceso consiste en barnizar las piezas para protegerlas del polvo y la humedad. El barniz suele ser el mismo que se emplea para madera (mate o brillante) o en spray. Con tres capas es suficiente.
MANUALIDADES EN LA REVISTA.

Comentarios

Entradas populares